Lo que hace que los cuencos cantores antiguos sean casi únicos en el mundo de los coleccionables es que tienen antigüedad, belleza y utilidad actual. Su atractivo es tan fuerte y la oferta tan limitada que se ha desarrollado una industria completa de fabricación de cuencos modernos para satisfacer la demanda. En esta sección solo encontrarás auténticos cuencos cantores antiguos.
Los cuencos cantores genuinos fueron forjados con una aleación de 7 metales: plata, oro, mercurio, estaño, plomo, cobre y hierro y martillados a mano, un proceso arduo que requiere habilidad y perseverancia. El artista comenzaría con una pieza plana de metal circular y la transformaría gradualmente en un cuenco. Los estándares de calidad de la época requerían un acabado liso, lo que significaba muchos golpes del martillo. Se necesitarían golpes ligeros finos para el acabado adecuado. Después de la formación vendría un adorno que podría variar desde simples cortes de martillo hasta elaborados grabados a mano. Esta obra de arte se desgastaría con el uso durante un período de tiempo muy largo.
Los cuencos para cantar, eran comunes en Nepal y en países adyacentes como el Tíbet, Bhután y el norte de la India. Los cuencos cantores eran posesiones muy importantes, hay registros de ellos como regalos en bodas y pasados a otros. En algunas fotos antiguas de gente común y mercados se pueden ver cuencos. Las estimaciones de la población de Nepal en 1900 son de alrededor de 3 millones, por lo que podría imaginarse que hay 10 millones de personas que viven en el área donde los cuencos cantores eran parte de la cultura.
Basándonos en el hecho de que estos cuencos fueron productos básicos tanto en el hogar como en el mercado, podríamos decir que se hicieron más de diez millones de cuencos en los últimos mil años.
Pero evidentemente hay un suministro finito de cuencos antiguos hechos a mano. Se han exportado cuencos cantores desde India y Nepal durante cuarenta años. En la década de 1980, el tipo de cuenco predominante exportado fueron los Manipuri. En la década de 1990 los Jambati y Ultibati se empezaron a exportar. El mayor volumen de cuencos cantores exportados fue en la primera década de este siglo. Los mayores vendedores enviaban cientos de miles de cuencos cada año. Eso nunca volverá a suceder, el suministro ya no está allí. Los mayores exportadores indios de esa época han abandonado el mercado de antigüedades para obtener beneficios más fáciles de los nuevos cuencos.
En términos generales el cuenco antiguo más común y de calidad/precio más recomendable en la actualidad es el Thadobati, y el de mejor calidad el Jambati, aunque esto siempre depende de la pieza en concreto.